Una onda suspendida
Sobre otra onda que también se suspende
No puedo más y moriré en la sombra
Junto a mí están los fallidos
estados de la invisibilidad
Y el monstruo de complexión monstruosa
Que llaman Steven
Tengo las manos atadas a la espalda
De la comezón
No puedo levantarme del sueño
Mientras los perros vagabundean en mi estómago
Tiemblo bajo la avalancha de relámpagos
Las cámaras y las pistolas aplauden y se lamentan
Del pobre tipo que se lanzó desde un penthouse
Las manos desnudas de compasión se exterminan
Se quitan las manchas de sangre
Perturbados como incendios continuos
Se dejan conducir a la nada
Donde un doctor
De nombre Guillotina
Les escupe en el rostro
de: MEME ROCHA
Hace 2 días
2 comentarios:
La primera estrofa tiene un ritmo que tropieza seguido. En la segunda, va arrancando muy bien pero cuando llega a la avalancha se cae otra vez el ritmo. Son pequeños detalles solamente. Por lo demás es bueno el poema. Saludos
Interesante... me gusto, tiene imagenes abstractas
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